Policías desalojan la UDLAP de profesores y alumnos
El desalojo es debido a un conflicto legal de la familia Jenkins
Aguascalientes, Ags. 30 de Junio. “El mes de junio recibe el nombre en honor la diosa Juno, diosa del matrimonio y reina de los dioses.”
Redacción.-
En Puebla, según testigos y usuarios en redes sociales, elementos de seguridad, policías y convoyes llegaron esta mañana a las instalaciones de la Universidad de las Américas (UDLAP) en Cholula y tomaron la institución, sin que hasta el momento haya información oficial sobre lo que ocurre.
De acuerdo con lo que se especula, se trataría de un desalojo de profesores y alumnos de esa institución por una orden judicial, debido a un conflicto legal de la familia Jenkins, la cual mediante su fundación, se convirtió en el principal sustento económico para la Universidad de las Américas de Puebla (UDLAP).
Hasta el momento se desconoce la acción legal o el sustento del proceder de los elementos de justicia, sin embargo, trascendió que la Universidad de las Américas Puebla y su fundación contarían con un amparo por lo que las acciones derivadas de los cuerpos de seguridad serían nulas.
Guardia Nacional aclara que ellos no participan en la toma de la UDLAP
Es importante decir que en la zona de la UDLAP, en su acceso principal de la Recta a Cholula testigos señalaron que existe una fuerte presencia de patrullas tanto de la Guardia Nacional como de la Policía Estatal. Sin embargo, mediante sus redes sociales, la Guardia Nacional negó haber participado en la toma de las instalaciones de la universidad.
La #GuardiaNacional informa que al momento, no participa en ninguna diligencia relacionada con la Universidad de Las Américas en Cholula, ni con ninguna institución educativa del estado de #Puebla
— Guardia Nacional (@GN_MEXICO_) June 29, 2021
De acuerdo con los primeros reportes, alrededor de las 9 de la mañana, unos 200 elementos de la policía estatal de Puebla acompañados de efectivos y agentes ministeriales de la Fiscalía poblana tomaron las instalaciones y abordaron a personal administrativo y jurídico de la institución quienes argumentaron tener un amparo por lo que solicitaron a los uniformados retirarse del campus, sin embargo la situación se tornó tensa luego del intercambio verbal que derivó en jaloneos y empujones entre personal de seguridad privada de la institución y la fuerza pública.
Sobre el hecho, la UDLAP no ha emitido una postura al respecto, sin embargo, por medio de sus redes sociales, desmintió un comunicado a su nombre que circula donde se asevera que un juez ordenó la entrega de sus instalaciones.
Redes se encienden ante toma de universidad
En redes sociales, alumnos y profesores cuestionaron el accionar de las autoridades, luego de que varios videos de las fuerzas públicas circularan.
En algunas imágenes que circularon se puede apreciar a la fuerza pública discutiendo con alumnos, profesores y funcionarios, quienes empezaron a ser desalojados del campus.
Hasta el momento, no existe una postura oficial de ninguna autoridad en Puebla así como tampoco de la rectoría de la universidad.
¿Cuál es el conflicto con la familia Jenkins?
De acuerdo con fuentes internas de la universidad el operativo policiaco respondería al intento de imponer a un nuevo patronato en la institución a partir del proceso legal que se sigue en contra de la familia Jenkins, como dicho proceso el instituto Poblano que regula en el estado a todas las fundaciones propuso a un nuevo patronato y hoy por la mañana los “nuevos patrones” acompañados de la fuerza pública llegaron a tomar las instalaciones.
En mayo de 2021 el juez sexagésimo de lo civil del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México ordenó el embargo y aseguramiento de cuentas en contra de la familia Jenkins que equivalen a 720 millones de dólares, como reparación del daño causado por desfalcar a la Fundación Mary Street Jenkins.
La fundación se constituyó en 1954 por William Oscar Jenkins, con la finalidad de hacer actos de caridad a través de diferentes tipos de apoyo y actos de altruismo en la ciudad de Puebla. Su fundador dispuso que sus herederos, sin ser dueños del patrimonio, participaran en el patronato sin remuneración alguna.
Cuando falleció Oscar Jenkins, sus herederos y patronos de la fundación, junto con sus abogados, sustrajeron alrededor de 14 mil millones de pesos de la institución, donando todos los bienes a otra fundación con residencia en Jalisco, que cambió su domicilio a la isla caribeña de Barbados, para finalmente establecerse en Panamá, paraíso fiscal donde los herederos del fundador se nombraron beneficiarios directos.