RFInforma / Ciudad de México / sábado 30 de septiembre del 2023

Redacción.-

Una preocupación frecuente entre quienes han dejado de cotizar al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) durante un período considerable es si aún tienen la posibilidad de obtener una pensión. Esta inquietud es comprensible, ya que la pensión representa una parte fundamental de la seguridad financiera en la jubilación.

La Ley del Seguro Social establece un concepto crucial conocido como la conservación de derechos. Este principio garantiza que los asegurados conserven los derechos que tenían para obtener una pensión por un período equivalente a la cuarta parte del tiempo cubierto por sus cotizaciones semanales.

En otras palabras, es un periodo de gracia otorgado por el IMSS durante el cual los trabajadores pueden solicitar el otorgamiento de pensiones, a pesar de haber dejado de cotizar por un tiempo.

Este período de conservación de derechos comienza a contar a partir de la fecha de baja del asegurado, que se refiere al momento en que una persona deja de cotizar al IMSS.

Es fundamental entender que esta «ventana» de tiempo es crucial para quienes desean obtener una pensión, ya que una vez que se agota, las posibilidades de obtener una pensión se vuelven más complicadas.

Duración de la conservación de derechos
La duración específica de la conservación de derechos en el IMSS depende de la cantidad de semanas cotizadas que acumules ante este organismo. Por ejemplo, si tienes un historial de 1000 semanas cotizadas, tu conservación de derechos abarcará una cuarta parte de esas semanas, lo que se traduciría en 250 semanas después de la fecha de tu baja del IMSS.

Es esencial recordar que, durante este período de conservación de derechos, puedes solicitar diversas pensiones, como la de invalidez, cesantía en edad avanzada, vejez, y aquellas relacionadas con viudez, orfandad o ascendencia que no derive de un accidente de trabajo. Es una oportunidad valiosa para asegurar tu bienestar económico en la jubilación.

Reactivación de las cotizaciones:
Pero, ¿qué sucede si has perdido la conservación de derechos debido a un largo período sin cotizar? No todo está perdido. Una de las opciones para reactivar tus semanas cotizadas, incluso si has perdido tu conservación de derechos, es volver a trabajar con un patrón formal que te registre en el IMSS durante al menos un año. Esto contribuirá a acumular nuevas cotizaciones y acercarte nuevamente a la posibilidad de obtener una pensión.

Otra alternativa es considerar la «Modalidad 40», un esquema que te permite seguir cotizando de forma voluntaria al IMSS. Para acceder a esta modalidad, debes cumplir con los requisitos estipulados en la Ley del IMSS. Mantener esta continuidad en tus cotizaciones puede ser una estrategia efectiva para preservar tus derechos a la pensión.

Planea tu pensión con tiempo:
En última instancia, la planificación temprana es fundamental para asegurar tu bienestar financiero durante la jubilación. Evitar llegar al punto en el que pierdas tu conservación de derechos es la mejor estrategia.

A medida que envejecemos, la contratación en empresas para personas mayores de 55 años puede volverse complicada, por lo que es crucial abordar el tema de la pensión con anticipación y tomar decisiones informadas.

Si te encuentras en la situación de querer actualizar tu conservación de derechos, deberás volver a cotizar al IMSS. El tiempo necesario para reactivar tus derechos dependerá del período en que hayas sido dado de baja del IMSS:

• Si han pasado menos de tres años desde tu baja, tus derechos se actualizarán automáticamente al momento de la reinscripción.
• Si han pasado más de tres años, pero no más de seis años, podrás actualizar tus derechos al haber cotizado un mínimo de veintiséis semanas (equivalente a seis meses) de nuevas cotizaciones.
• Si han pasado más de seis años, la actualización de tus derechos requerirá un mínimo de cincuenta y dos semanas (equivalente a un año) de nuevas cotizaciones.

Ahora ya lo sabes, si aspiras a obtener una pensión a través del IMSS, la conservación de derechos es solo uno de los requisitos a cumplir. La planificación financiera y la comprensión de los procesos involucrados son esenciales para garantizar una jubilación segura y cómoda.

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