RFInforma / Laura Centeno  / Ciudad de México / jueves 3 de abril del 2025

Redacción.-

El hotel que supuestos prestanombres de Genaro García Luna compraron a Julia Elena Abdalá Lemus, pareja sentimental de Manuel Bartlett, es un inmueble de tres pisos ubicado en el número 40 de la calle de Leibnitz, en la colonia Anzures de la Ciudad de México.

En entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva, Abdalá confirmó que miembros de la familia Weinberg, señalados por las autoridades como cómplices de García Luna, transfirieron 4.5 millones de dólares a cuentas bancarias de ella y de la offshore panameña Roybell International Inc., en la que era accionista.

La empresaria y pareja del exdirector de la CFE, Manuel Bartlett, justificó las transferencias alegando la venta a los Weinberg, en mayo de 2012, de un hotel boutique ubicado en la calle de Leibnitz.

Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) identificó la ubicación del hotel y documentos de transacciones realizadas en 2012 entre Abdalá y los Weinberg.

Registros históricos de Google Street View muestran que en enero de 2012, tres meses antes de que los Weinberg compraran el hotel a la pareja de Bartlett, su fachada estaba rotulada con el nombre “Lumina Luxury Suites”, marca que fue registrada en junio de 2010 ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) por B White S Suite S de RL de CV, una compañía propiedad de Abdalá.

Actas del Registro Público del Comercio revelan que en noviembre de 2012, ya consumada la compra del inmueble, Abdalá renunció como gerente de la empresa y Alexis Weinberg asumió ese cargo. Sin embargo, no hay constancia de que Abdalá haya cedido o vendido su participación accionaria.

Rosalba Tapia Alvarado, quien ha trabajado como asistente personal de los Weinberg, fue nombrada como apoderada de la sociedad mercantil.

Actualmente, el inmueble vendido por Abdalá ya no funciona como hotel. En el lugar tiene su domicilio una empresa que forma parte del conglomerado de los Weinberg, la cual también es investigada por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) como parte de la red de lavado de dinero de los presuntos cómplices y prestanombres del exsecretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna.

Como lo reveló MCCI, documentos de la demanda civil que la UIF mantiene desde 2021 contra los Weinberg en Florida demuestran que el 12 de junio de 2024, la jueza del caso, Lisa Walsh, envió una carta rogatoria a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) solicitando la información bancaria de Julia Abdalá.

En esa misma fecha, la jueza también pidió a diversos bancos la información de las cuentas de Rosalba Tapia Alvarado, apoderada de B White S Suite, empresa en la que participaron tanto Abdalá como los Weinberg.

Coinciden traspasos con contratos
Los Weinberg transfirieron a Abdalá el dinero por la presunta compra de su inmueble de la calle Leibnitz 40 desde la cuenta bancaria de Nunvav Inc., en el Occidental Bank de Barbados.

Esa misma cuenta concentró una parte de los fondos malversados que provenían de 30 contratos que el entonces CISEN y el Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social (OADRPS) otorgaron irregularmente a Nunvav Inc y Nunvav Techologies Inc, empresas de los Weinberg, entre 2009 y 2018.

La venta del hotel de Julia Abdalá se dio, precisamente, durante el periodo en que las compañías de los Weinberg recibían cientos de millones de dólares en contratos de los gobiernos de Calderón y de Peña Nieto

Julia Abdalá recibió 2.7 millones de dólares en dos cuentas personales que tenía en Banco Inbursa y Caixa Galicia, un banco radicado en Galicia, España. Mientras que 1.8 millones de dólares se depositaron en las cuentas de Roybell International Inc. en el Union Bancaire Privée, un banco de Suiza, país que es un paraíso fiscal.

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