¡NO ES UN AÑO QUE SE VA!
Que los años se acumulen es un triunfo al que luchó, y si en éste lo lograste recibiste bendición.

Por Rodolfo Franco
El año que termina no es un año que se va, es un año que se queda, para bien o para mal .
En el inexorable paso del tiempo, los días son gotas que perforan la existencia, y cada quien en su conciencia tendrá la explicación, justificar al almanaque ya no tiene ninguna razón.
Habrá luchas inicuas y batallas que festejar, muchas noches sin estrellas y soleados días con oasis que aparecerán, pero el año que comienza es de frutos si los siembras; se tenaz y no te venzas, porque habrá días de llanto y otros tantos de sorpresas, pero nunca de pereza, pues la madre de tu triunfo se alimenta de tu fuerza.
Ya no invoques al pasado porque no regresará, aprovecha hoy tu fuerza que es motor a tu existir, y si ya cansado piensas que ya es hora de partir, organiza bien tu vida y verás que encuentras la razon para volver a persistir.
Que los años se acumulen es un triunfo al que luchó, y si en éste lo lograste recibiste bendición.
¡No es un año el que se va, es un día el que acabó!